viernes, 2 de enero de 2009

La mujer que perdió totalmente la cabeza (que es esposa del h. que creía ser h.)

La mujer que perdió totalmente su cabeza no recuerda del todo bien cómo sucedió su rebanada/de/cabeza. Imágenes sueltas se le meten por quién-sabe-donde cada vez que le preguntan por su decapitación. Ella mueve las manos tratando de explicar con una extraña posición de los dedos que lo que más recuerda es que estaba de espaldas a su vida cuando ocurrió, corriendo por algún lugar lejos de este planeta de la mano de algún desconocido que desconoció en el metro y ya iba por la órbita de Plutón (que ya no es planeta) cuando escuchó el chiki-chiki de una tijera y luego paf, la cabeza en el suelo y lo vio todo desde abajo.
Ahora no imagina,
no sueña,
no llora,
ni ríe.
La mujer que perdió totalmente su cabeza aún sigue pensando en algo que hacer (puesto que el hecho de NO tener cabeza le reduce bastante las opciones a elegir).

1 comentario:

Sanc.y dijo...

extrañaba leer tus entradas..pobre señora, pensandolo bien, debe ser terrible no tener cabeza, y pensandolo mejor aun, es mas terrible, tenerla y no utilizarla, pensar que se supone q por el exo de tener cabeza, podriamos experimentar sensaciones tan linda y tan humanas como llorar o reir o pensar, pero aveces tenemos la cabeza bien en su sitio, logramos escapar d las malditas tijeras, y quizas de uno q otro desconocido, y aun asi, con cabeza y todo, no experimentamos nada, no sentimos nada, no lloramos nada, no reimos nada, no elegimos nada...curioso