jueves, 10 de enero de 2008

fsdjf

Escribí una historia donde todo era posible. Todo lo que faltaba ahora estaba ahí en el lugar donde debía estar. Los espacios en blancos los llené con algo llenador de espacios-en-blanco. Las gallinas podían volar por el cielo, por entre las calles y posarse en las ramas de los árboles, cagarles a la gente y luego darse a la fuga. Las palomas dejaron de ser una plaga y la gente las quería, las alimentaba y les daba mucho amor con chocolate y rosas rojas de esas típicas que uno regala en el día de san valentín ( nunca he regalado una rosa, menos en san valentín). la televisión desapareció, y la gente comenzó a salir a las calles, a los campos, a mirar el cielo, las estrellas, a besar los árboles y dormir en la tierra. Y muchas cosas más

4 comentarios:

María Ignacia dijo...

yo la quiero leer.

te quiero

Sanc.y dijo...

como que nunca has regadado una rosa?

mmm

bueno sera
todo es posible, si uno lo intenta, y si no, bueno siempre nos keda el soñar :)

Hans dijo...

era posible intentar olvidar a una perdona?

Totó dijo...

Si existiese ese mundo , mi amor , los imposibles no existirían y los anhelos se volverían un pan de cada día , nuestros sueños no serían ya sueños serían una rutina en la que estaríamos sumidos y de la que no podríamos salir .


Un besote desde aca, P.A.A.C

te amo con frenesí,


Fram!º